CARPINUS BETULUS L.
Aspecto general y detalles de hojas y amentos
Familia: Betulaceae
Sinónimos: Carpinus caucasica Grossh., Carpinus quercifolia Desf. ex Steud., Carpinus ulmoides Gray, Carpinus vulgaris Mill.
Nombre común: Carpe, ojaranzo
Lugar de origen: Nativo de gran parte de Europa, Rusia, Irán, Turquía.
Etimología: El género procede de su nombre clásico latino carpinus,-i = el carpe y su madera. Algunos autores dicen que podría proceder del celta car = madera y pen = cabeza, porque su madera era utilizada para fabricar yugos. El epíteto específico procede del latín betula,-ae = nombre clásico latino del abedul, árbol con el que guarda relación.
 

Descripción: Árbol caducifolio, monoico, que puede alcanzar en cultivo 20-25 m de altura, con la copa piramidal en los primeros años, tornándose irregular y abierta con el paso de los años, y un tronco erecto, de sección irregular, con la corteza lisa de color gris ceniciento, acanalada verticalmente, que con los años se va oscureciendo y agrietando. Ramillas de color marrón grisáceo oscuro, con pubescencia diminuta. Yemas ovoides, delgadas, agudas, glabras, de 8-12 mm de largo, con escamas marrón rojizas. Hojas simples, alternas y dísticas, de ovadas a oblongas, de 4-10(-12) x 2,5-6 cm, con la base redondeada o subcordada y algo asimétrica, el margen irregular y doblemente dentado, y el ápice agudo o cortamente acuminado; son glabras y de color verde oscuro por el haz, y de color verde más claro y con pelos en los nervios por el envés; nerviación con 10-15 pares de nervios paralelos secundarios, impresos por el haz y resaltados por el envés; pecíolo de 6-12 mm de longitud, pubescente. Las hojas son algo marcescentes y permanecen algo secas durante bastante tiempo sobre el árbol. Inflorescencias de ambos sexos sobre el mismo árbol, hacia el final de las ramillas; flores masculinas desnudas, en amentos colgantes cilíndricos, amarillentos, de 3-6 cm de largo, con 6-12 estambres de anteras amarillas unidos a la base de brácteas simples, deltoide-ovadas, acuminadas, muy cóncavas, más largas que los estambres. Aparecen normalmente al mismo tiempo que las hojas nuevas y sobre la madera del año anterior. Flores femeninas apétalas, dispuestas en amentos más cortos que los masculinos, apareciendo más tarde que éstos al final de las ramillas del año; son muy pequeñas y verdosas, con un cáliz denticulado unido a un ovario ínfero, bilocular, con un estilo corto y 2 estigmas rojizos; cada flor está sustentada por una bráctea aguda y dos bractéolas diminutas en su base. Infrutescencia colgante, de 6-15 x 5-7 cm, formada por el alargamiento de las brácteas y bractéolas que sustentaban las flores. El fruto es un aquenio ovoide, comprimido, de 5-10 mm, verdoso, con 7-11 surcos, protegido por una bráctea de 3-5 cm de largo, verde, papirácea, trilobada, con los dos lóbulos laterales más pequeños y enteros y el central 2-3 veces más largo que los laterales y entero o dentado.

Cultivo y usos: Gusta de suelos frescos y profundos, que drenen bien, mejor algo ácidos, en exposición soleada. Se multiplica por semillas frescas, que tardan bastante en germinar, aunque también por injertos. Su crecimiento es algo lento y es un árbol no demasiado longevo. No tolera bien el trasplante, que debe hacerse con cepellón. Especie con la que pueden formarse setos, pues admite el recorte. Su madera es dura y se emplea en la fabricación de pequeños artículos y como combustible por su elevado poder calorífico. Las hojas constituyen un buen forraje para el ganado. Algunos cultivares son ‘Columnaris’, con un eje central y ramas secundarias ascendentes; ‘Fastigiata’, con un porte piramidal y ramas erectas; ‘Pendula’, con ramas arqueadas y colgantes; ‘Incisa’, con hojas fuertemente dentadas.

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