Familia: Cupressaceae

Sinónimos: Thuja orientalis L., Biota orientalis (L.) Endl, Thuja pyramidalis Ten.

Nombre común: Tuya oriental, árbol de la vida

Lugar de origen: Procede de China, pero desde la antigüedad se ha cultivado en otras zonas de Asia y ha escapado al cultivo, siendo por ello algo difícil precisar sus zonas exactas de origen, aunque se cree que además de China puede ser nativa de algunas zonas adyacentes de Corea y Rusia. En Japón, la India o Irán ha sido introducida y se encuentra naturalizada.

Etimología: Platycladus, procede del griego platys = plano, chato, ancho, y klados = rama, en alusión a sus características ramillas aplanadas y dispuestas en planos verticales. El epíteto específico orientalis procede del latín orientalis,-e = oriental, de oriente, por su procedencia.

 

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Descripción: Árbol siempreverde, monoico, que puede alcanzar 20 (-30) m de altura en su lugar de origen y hasta 1 m de diámetro de tronco, aunque en cultivo en nuestra zona no suele pasar de un arbolito de 8-10 m de altura; copa más bien estrecha y cónica, especialmente de joven, tornándose redondeada e irregular con el paso de los años; tronco a veces ramificado desde poca altura, con la corteza delgada, castaño-grisácea, exfoliándose en largas tiras longitudinales. Ramillas extendidas, ascendentes o erectas, comprimidas, dispuestas típicamente en planos verticales, característica que se va perdiendo con el paso de los años. Hojas escamiformes, carnosas, dispuestas en 4 filas, decusadas, decurrentes, de 1-3 mm de largo, de color verde claro o verde amarillento, con una glándula resinífera lineal en el centro por el envés; las hojas frontales son más o menos rombiformes y con el ápice redondeado, mientras que las laterales son ovales, tienen el ápice ligeramente incurvado y se solapan sobre las frontales. Conos masculinos verdoso-amarillentos, ovoides, terminales, de 2-3 mm de largo, cada uno con 8-12 microsporófilos; conos femeninos terminales, solitarios, subglobosos, de color azulado-verdosos al principio tornándose finalmente marrón rojizos, de 20-25 x 10-18 mm, formados por 6-8 escamas carnosas o coriáceas, decusadas, planas, provistas de un gancho apical, las 2 escamas proximales fértiles y con 2 semillas y las 2 distales fértiles y con 1 semilla, las otras estériles. Es dehiscente en la madurez, cosa que ocurre en 1 año, liberando unas 6 semillas ovoides o subelipsoides, pardo-rojizas o pardo-grisáceas, de 5-7 x 3-4 mm, finamente arrugadas, generalmente sin alas o con alas muy finas.

Cultivo y usos: Especie muy resistente y tolerante que admite su cultivo en muchas clases de suelos, aunque los prefiere más bien húmedos, pero que drenen bien, y mejor si son neutros o ligeramente ácidos. Tolera exposiciones soleadas o a media sombra y soporta bien la sequía una vez establecido. Aunque tolera las podas, no es la especie más apropiada para su uso formando setos recortados, no así para formar barreras. Tiene un crecimiento moderadamente rápido. Se reproduce por semillas con relativa facilidad, aunque para mejorar la germinación se acude a la estratificación de las semillas antes de la siembra; también es posible la multiplicación por injertos y por esquejes utilizando hormonas de enraizamiento, especialmente indicados para propagar los cultivares. De sus hojas, corteza y semillas se destila un aceite esencial, y su madera se utiliza en pilares y mobiliario. Además de la forma típica, pero con porte de arbolito, pues existen otras formas enanas muy utilizadas en rocallas, se cultivan en jardinería otras formas de porte estrecho o más o menos piramidal  con los brotes de color amarillo dorado, de gran efecto ornamental. La acción del frío pone el follaje con tonos marrones, lo que no debe asustarnos, pues al subir las temperaturas se recupera el color verde.